¿Cómo influyó tu entorno rural en tu desarrollo como artista?

Crecer cerca del campo ha hecho que sienta pasión por la naturaleza y su belleza. Empecé pintando paisajes y animales porque es algo que amo, y eso hizo que se abrieran nuevos horizontes y temas que tratar a través del arte.

¿De qué manera tus experiencias personales se reflejan en tu arte?

Mis obras no son tanto un diario explicito de mis experiencias personales sino mas bien un espacio donde reflexionar y estirar un pensamiento, hacerlo visible a través de la pintura. Al final para mí el arte es terapéutico y me ayuda a sanar, aceptarme y crecer. Un ejemplo de esto puede ser la pintura “El Baile de los San Sebastianes”, un díptico en el que, usando la figura de San Sebastián como icono gay, quise plasmar que, pese a las heridas, seguimos vivos y celebrandónos.

Rodrigo de Brujas es un artista residenciado en Madrid.

¿Cómo te afectó emocionalmente el proceso de encontrar y abrazar tu identidad queer?

Fue duro, al principio no me aceptaba a mi mismo y quería cambiar. Tras una adolescencia muy triste y de negación me di cuenta de que tenía que aceptarme. Aunque fue un proceso lento, hoy puedo decir que estoy feliz de ser un hombre gay y que ni muerto sería hetero (risas).

Trabajo con acuarelas y oleos por lo diferentes que son la una de la otra, mientras que la acuarela es más inmediata y espontánea, y tienes que tener muy en cuenta la luz; con el oleo puedes permitirte un proceso más largo, ir hacia delante y atrás cuando quieras, recuperar capas de pintura tapadas, rascar etc.

¿Qué te atrae de las técnicas de la acuarela y la pintura al óleo?

¿Cómo decides qué técnica usar para cada obra?

Depende de la idea. En función de la temática o lo que yo creo que necesita esa idea, prefiero explorarla con un medio u otro. Al final se trata de ver como los materiales te pueden ayudar a llegar a la mejor expresión de esa idea.

¿Qué papel juega el color en tu trabajo?

El color es crucial en mi obra, ahora mismo estoy en un momento en el que me trabajo mucho con colores vibrantes y muy saturados, intentando crear un alto contraste que llame la atención.

¿Qué aspectos de la comunidad LGBTQ+ buscas resaltar en tu arte?

Uso el arte para plasmar mi experiencia personal, mis sentimientos y pensamientos. Mis deseos e incertidumbres.

¿Cómo eliges los temas y personajes para tus pinturas?

Tomo inspiración de muchos lugares, como la historia del arte, artistas queer contemporáneos, redes sociales como Pinterest, instragram o Tumblr, así como de la vida real, historias y experiencias personales o de conocidos.

¿Qué mensaje esperas transmitir sobre la comunidad LGBTQ+ a través de tu trabajo?

En el fondo el mensaje que esperaría transmitir es uno de resistencia, resilencia y celebración. Pese a los esfuerzos de la sociedad por filtrarnos y llevarnos a un segundo plano seguimos y seguiremos siempre aquí. No importa que giren la cabeza a otro lado, estaremos también ahí para que nos vean, celebrando la vida queer.

¿Qué opinas sobre la representación de la queeridad en el arte contemporáneo?

Pese al momento político que vivimos, la sociedad nos acepta como nunca antes y vivimos un momento de inclusión y representación excepcionales en el mundo del arte.