Cuatro años de Me Siento Extraña: Verushka y la fuerza de crear juntas
Verushka es una DJ y artista venezolana afincada en Barcelona, donde ha encontrado un punto de encuentro entre la experimentación sonora y la construcción de comunidad. Como cofundadora de Me Siento Extraña, colectivo clave en la escena queer y underground de la ciudad, impulsa espacios donde la música se vive como un acto de cuidado y resistencia compartida. Residente en TORAX, y con un año marcado por su paso por Whole Festival en Berlín y Festival B en Barcelona, Verushka celebra ahora el aniversario de Me Siento Extraña, reafirmando una forma de entender la pista desde la colectividad, la libertad y el afecto.
Cuatro años de Me Siento Extraña: Verushka y la fuerza de crear juntas


Eres venezolana, y tu música ha viajado desde tus raíces hasta la escena underground de Barcelona. Si pudieras crear un mapa sonoro de tu infancia en Caracas hasta tu actualidad aquí, ¿qué paisajes sonoros aparecerían y cómo han influido en tu sonido actual?
Creo que haberme criado en Caracas me expuso a una enorme variedad de sonidos. Ese tipo de frecuencia, de vibración, de percusión… se te queda dentro, no sé si en el ADN o en algún otro lugar, pero permanece.
Desde muy peque sentía curiosidad por lo que se escuchaba en los 90 y 00s, especialmente la changa y todo lo que sonaba en las minitecas. En mi caso no es algo evidente, no escuchas un set mío y piensas “ah, esto viene de la changa”, pero está ahí, en la forma de vivir el sonido, en cómo entiendo el cuerpo y su energía en la pista. Al final, hay influencias de todo: del tecno-merengue, de la changa, hasta incluso del euro dance, trance y el trip hop… de muchas cosas que en esa época ni siquiera sabía cómo nombrar, pero que ahora reconozco como parte de mi manera de sentir el musica.
¿Cómo sientes Barcelona ahora en comparación a cuando llegaste?
Cuando me mudé a Barcelona tenía un grupo de post-punk, tocaba el bajo y exploraba otros sonidos, aunque la electrónica siempre estuvo presente en lo que escuchaba. Pinchaba de vez en cuando en fiestas de amigxs, sin tomármelo demasiado en serio todavía.
La escena underground siempre ha existido en Barcelona, pero antes era más dispersa. Pasaban cosas interesantes, sí, pero ahora siento una conexión mucho más fuerte entre quienes estamos creando. Los colectivos queer han abierto espacios y propuestas increíbles, y también han surgido proyectos que van más allá del club, con nuevas ideas y formatos.
Hoy la escena contracultural está más unida y eso nos da mucha fuerza. Ver cómo desde lo underground empezamos a ocupar espacios importantes: clubs, festivales, incluso otras ciudades, demuestra el impacto real de todo lo que se está construyendo conjuntamente.
Verushka es una DJ y artista venezolana afincada en Barcelona, donde ha encontrado un punto de encuentro entre la experimentación sonora y la construcción de comunidad. Como cofundadora de Me Siento Extraña, colectivo clave en la escena queer y underground de la ciudad, impulsa espacios donde la música se vive como un acto de cuidado y resistencia compartida.
Residente en TORAX, y con un año marcado por su paso por Whole Festival en Berlín y Festival B en Barcelona, Verushka celebra ahora el aniversario de Me Siento Extraña, reafirmando una forma de entender la pista desde la colectividad, la libertad y el afecto.
En esta conversación, hablamos con ella sobre raíces, procesos creativos y los aprendizajes que deja construir escena desde lo común.
Enganchando con la pregunta anterior, ¿Cómo dialogan entre sí tus experiencias como mujer latinoamericana en el underground europeo y tu forma de hacer música?
Creo que algo que me sostiene mucho en lo que hago es la comunidad. Los espacios que intentamos crear desde el underground, desde las disidencias y las minorías, son espacios de resistencia, donde buscamos visibilizarnos y mostrar la riqueza de lo que cada una aporta.
Ser una persona latinoamericana en el exterior también implica formar parte de un resurgir del sonido latinoamericano, de una apertura donde nos estamos dejando escuchar mucho más.


Este año pinchaste en Festival B, también en Whole Festival en Berlín, ¿Cómo estuvieron estas fechas? ¿Qué tal lo viviste?
El Whole Festival, que es uno de los festivales queer más grandes de Europa, fue una experiencia totalmente life-changing. Esta vez fuimos como Me Siento Extraña, en colectivo junto a nuestras residentes, y vivir un espacio con tanta libertad fue casi una utopía. Nos llevamos una experiencia súper enriquecedora, con muchas conexiones con personas increíbles, y para MSE fue un momento muy importante: poder llegar hasta ahí como colectivo y tener esa repercusión a nivel internacional.
El Festival B también fue muy especial para mí. Fue un set que disfruté muchísimo, me sentí súper feliz de formar parte y de ver a la gente vibrando con un sonido tan potente. Me parece una alternativa muy valiosa a los grandes festivales, porque realmente da espacio a lo que está pasando localmente y a artistas emergentes.
Lo que más me gusta de TORAX es la libertad para experimentar con sonidos distintos, y arriesgarme un poco más en probar cosas nuevas. Me permite explorar sonidos que por ejemplo, en Me Siento Extraña, ya tienen una identidad más definida conmigo. Aquí puedo ser mucho más rara, y me encanta.
Además, la gente que va a TORAX es muy receptiva; se genera una experiencia comunitaria donde la pista y quien pincha se retroalimentan en muchísima sincronía. Hay una conexión muy fuerte entre el público y el DJ, y eso hace que todo se vuelva casi meditativo. Las personas que van a TORAX, van a bailar y es algo totalmente palpable, y el no poder usar los móviles, tiene un impacto en como se vive la pista.
Tu residencia en TORAX (Razzmatazz) te conecta con la escena underground más experimental de Barcelona. ¿Cómo influye este espacio en tu creatividad y en la manera en que construyes tus sets?


Como co-fundadora de Me Siento Extraña, ¿cuál fue la intención inicial al crear este espacio y cómo ha evolucionado hasta hoy?
Cuando comenzamos, la idea era sencilla: crear un espacio FLINTA* para disidencias queer; mujerxs, p/no binarias, p/trans fem/masc & otredades. Me Siento Extraña nació como un lugar abierto a que pasen muchas cosas, y ha ido creciendo y transformándose a medida que nosotras también lo hacemos dentro del proyecto.
Hoy sigue siendo algo vivo y en movimiento. Tenemos la residencia de los lunes en el Candy Darling, donde conviven presentaciones de libros, debates, poesía o proyectos como Bingo For Them, que recauda fondos para personas de la comunidad, Shes not a dj, tenemos una radio, Soft Karaoke. También abrimos espacio a quienes están empezando proyectos, y que MSE pueda ser una plataforma para darnos visibilidad lxs unxs a lxs otrxs y crear más red.
¿Qué significa para ti celebrar un aniversario de Me Siento Extraña después de varios años de activismo musical y cultural?
Celebrar este aniversario rodeadas de nuestras residentes, familia y de la gente que ha acompañado el proyecto desde el inicio es muy emocionante. Es como ver todo el camino recorrido, lo que hemos construido juntxs, y cómo ha crecido Me Siento Extraña más allá de nosotras. Hacerlo en NITSA, además, nos hace mucha ilu.
Es nuestra primera vez allí y sentimos que simboliza ese puente entre lo underground y los espacios más grandes que apuestan por lo local y que ponen la confianza en lo que hacemos. Poder celebrarlo con artistas que admiramos, que son referencia y que también son parte de nuestra red lo hace todavía más especial.
Tras años de Me Siento Extraña, ¿qué enseñanzas o instantes te han marcado más, y cómo te gustaría que esta noche de aniversario se viva y se recuerde dentro del colectivo?
Creo que una de las mayores enseñanzas de Me Siento Extraña es que cuando hacemos las cosas juntxs, todo cobra más sentido. Ahí es donde realmente se genera cambio, tanto en la sociedad como en los espacios que habitamos.
Cuidarnos, escucharnos y crear desde el amor y el respeto nos aleja de esa lógica individualista que muchas veces se impone. Lo individual también tiene su lugar, pero considero que juntas somos más fuertes y visibles.
Esa fuerza colectiva es lo que me gustaría que se sintiera esta noche: celebrar lo que hemos construido, lo que seguimos aprendiendo y obviamente, todo lo que aún está por venir <3


